Queridos complejos...

Los complejos se apoderan de nosotros, nos hacen pequeños y débiles. 
Los complejos siempre en los ojos del que se mira así mismo. 

Que más da ser gordo, delgado, moreno, pelirrojo, que más da la maldita portada del libro sí lo importante es el interior, lo que te enseña al leer cada una de sus páginas, cómo pasará contigo cada vez que alguien decida leer cada uno de tus pensamientos más ocultos. 
Quizás seamos esclavos de una imagen estúpida, de unos prejuicios que no tienen sentido en nuestra vida y de criticar lo que hace él otro sin pensar en lo que estamos haciendo mal nosotros. 
Dime ¿qué más da una ropa u otra? Lo importante es verse bien con uno mismo, luchar por vencer cada una de tus metas y aceptar tus errores sin decaer herido en ellos. 
No hay nadie guapo ni feo, pues la belleza está en los ojos de quién la mira y simplemente eres especial por ser tú mismo, porque no hay nadie más con tus sentimientos, tus emociones, tus inquietudes, tus recuerdos... 
Pero siempre tenemos el mismo problema escudarnos en los errores, en los miedos, en los fantasmas y negarnos que somos alguien distinto y especial, que no por ello es malo y hay que ocultarse. 
Siempre estamos en el borde de la deriva por buscar ser algo que nuestra alma no nos pide que seamos, algo que ansiamos porque así mucha gente nos dirá lo geniales que somos... ¿En serio es tan importante la opinión de los demás? No, todas las opiniones son subjetivas y por tanto no se adecua a la realidad. Incluso este texto no se adecua a una realidad universal, sino a mi propia realidad que se compartirá con más realidades al estar de acuerdo conmigo. 
Quizás nuestro mayor error sea perder todo por enseñar la portada, ocultar nuestro interior y privar a la gente de que aprenda de nuestro componente interno. 

Lo especial de conocer a la gente es el propio reto de mirar más dentro de una persona y adentrarte en una aventura de la que posiblemente salgas herido, aunque habrá merecido la pena por todo lo que te has llevado en tu mente.

Lo importante para vencer todos los fantasmas no es ser de una manera para sentirte fuerte, es quererte a ti mismo tal y como eres y poco a poco adaptarte a las nuevas situaciones. 
Adentrarte en nuevas experiencias y salir de vez en cuando de esa cueva de confort, porque no tienes ni idea de lo que estará a punto de ocurrirte fuera. 
Lo más bonito que hay es escribir a una persona en literatura fantástica y descubrir que era lo verosímil de tu historia. 

Me hace gracia  cuando me preguntan que prototipo de persona me gusta, pues sin duda tengo claro que nunca podré imaginarme de quien me voy a enamorar porque no busco alguien hecho a medida, sino aprender las medidas de toda la construcción de su mundo mental, que quizás puede convertirse en mi sitio favorito. 

V.K.