Gracias de corazón...

A veces no somos conscientes de lo que tenemos, pero sé que tengo mucha suerte de tenerte cerca.

Llevo toda una vida a tu lado y creo que el camino que me has forjado es muy bonito. 

Admiro a muchas mujeres, pero creo que tú eres la primera, porque siempre has estado con tu sonrisa, tu fuerza, tus detalles y tu cariño. 

Siempre has sabido darme las pequeñas cosas que me faltaban, y no por ello me refiero a lo material, si no consejos que se quedan bajo mi piel, aunque aún no los haya aplicado del todo. 

Has cuidado de la niña que era, para dar paso a la persona que está creciendo en mi interior y que aún no acabo de entender muy bien, pero que sigues cuidando con esmero de ella. 

Dicen que abuela sólo hay una, para mí no es que seas la mejor abuela que podría tener (porque todos los nietos dicen eso, ya que sólo han convivido con las suyas), para mí también eres la mejor persona que puedo tener a mi lado para crecer, superarme y sentirme querida. 

Gracias por todo, gracias por lo que me has dado, gracias por ser literatura, felicidad y el tiempo más bonito que una persona pueda pasar. 

Eres un gran ejemplo a seguir y eres una gran parte de la literatura que a día de hoy nace en mi interior y me salva, porque sin tus cuentos, tus torres gemelas en un pueblo o sin tus ganas de hacerme soñar, nunca habría desarrollado toda la creatividad que corre por mis venas. 

Te quiero mucho. 

V.K.