Re-nombrarnos como acantilado.

Me he reflejado en unos ojos de neón.
He deseado besar labios fugitivos
y rozar tus estrellas con mis manos.
Caminar por tu paseo marítimo,
acercarme a ti lo más posible
y reflejarme en tu corazón.
He deseado sentirme libre con alguien,
sentir que estás palabras no están vacías de persona.
Dejar de sentirme el bicho raro de los humanos,
pero a la vez sentirme fuerte cuando la soledad me abraza.
He deseado ser fuerte y luchar por mis ideales,
pero a veces me encuentro llevándome la contraria.
Consigo encontrarme perdida en mi propia mente,
pasear por mis montañas antagónicas a tu mar.
Sin embargo, mírame a los ojos
y dime, amor, si no es idílico,
juntar el mar con las montañas
y re-nombrarnos como acantilado.