Definición perfecta por la que maldecirme

Tus ojos me hipnotizan,
me atraen como el canto de una sirena,
hacía el abismo que es tu boca.
Tus ojos me inspiran,
me ayudan a escribir versos que serán olvidados,
en la memoria de un viejo móvil.
Tú eres mi poesía preferida.
Eres el lugar donde pasaría horas.
Eres un ángel con alas que vuela muy lejos de mí,
pero por ti haré que el hombre vuele.
Te buscaré incluso cuando no tenga  ganas de hacerlo.
Te encontraré cuando no te esté buscando.
Buscaré cualquier escusa tonta para hablarte,
y me morderé los labios cuando escuche tu respuesta.
Mi corazón se acelerará al verte sonreír.
No obstante me maldeciré por escribirte poesía y no encontrar el momento de decírtela.