Tres años

Tres años antes y una plaza llena de mesas. No entendía muy bien donde estaba y no entendía muy bien sus sentimientos, ya que todo lo que en ese momento había sido para ella una novela de amor romántico, acabó siendo una sátira, donde una vez más se le demostraba que estaba equivocada.
Tres años antes, una niña que disfrutaba con la música, se enamora de una melodía tocada por un guitarrista italiano y después de buscarle por las mesas para darle dinero, se lleva en su poder un disco.
Tres años más tarde, esa niña ha crecido y sentada en una mesa, agobiada por diferentes temas, vuelve a sonar su melodía y todos los males se le van marchando lentamente. Observó a su alrededor y no era la única, un señor enfermo disfrutaba de cada nota que la guitarra emitía y le daba la enhorabuena al músico por cada compás tocado.
Tres años más tarde, todo ha cambiado. Sin embargo, todo está de la misma manera con esa niña ilusionada en mi interior.

Y por una vez más, la casualidad me devuelve encontrarme con aquel guitarrista que un día cambió mi felicidad.