Cicatrices.

Después de ver una sesión de fotografías en instagram de @shopiemayanne, me he inspirado en ésta última para escribir esta entrada y que espero que sirva de motivación para todas aquellas personas que lo lean.
Las cicatrices son parte de nuestro pasado, marcas que se quedan en nuestra piel y nos van formando en nuestra personalidad, y por tanto, ocultarlas es un completo error. Es triste avergonzarte de aquella pequeña herida que se te hizo en la rodilla cuando te caíste en el asfalto jugando con tus amigos; una completa pérdida de tiempo, también, tener un complejo por las marcas de varicela que se te han quedado en la piel y así podríamos definir millones de cicatrices que se han ido creando en nuestro cuerpo por un accidente.
No podemos romper con los complejos que llevamos dentro, ya que quererse a uno mismo al cien por cien es una falacia bastante grande, pero sí creo que podemos intentar destapar lo máximo de nosotros, sin preocuparnos de lo que vayan a decir los demás. Es importante intentar aceptar todo lo que podamos de nosotros mismos, sin ajustarnos a las ideas tóxicas de otras personas, tan sólo disfrutar de nuestra esencia, de esa energía que se acumula en nosotros y que podemos transmitir a otras personas.
A veces está bien desnudarse delante de las personas, contarles nuestros problemas y quedarnos desvelados mirando todas las heridas que se han acumulado en su mente durante tanto tiempo. Incluso es bueno desnudarse a solas, acariciar esas marcas y recordar que de algún modo pudiste superar aquella pequeña situación inesperada.
A veces es necesario cerrar los ojos y mirar a nuestro pasado, porque aquella herida abierta que tanto sangró ha cerrado y, por tanto, tienes posibilidades de cerrar otras nuevas.
Es importante perdonarnos de vez en cuando y creer en nosotros, porque si no crees en ti mismo todo serán obstáculos que te complicarán el día a día. Y no, no nos engañemos, la vida no es justa, ni fácil, ni sencilla, pero si puedes disfrutar y revivir de vez en cuando. Es incluso muy importante disfrutar de tu entorno, ya que la vida millones de veces te ofrece personas que te lo dan todo y te ayudan a superarte, son como una especie de golpe de suerte en medio de toda tu tristeza y por ello es importante agradecerles todo el tiempo que puedas ese apoyo incondicional que te muestran.
Es importante saber que las cosas se superan y que les heridas de guerra también acaban cesando, que puedes mirar a aquella persona que te hizo daño y saber que has desmontado toda su teoría de destrucción masiva.
De suma importancia es luchar por tus pensamientos, argumentar respetuosamente tus ideas, pero no abandonarlas nunca, a no ser que hayas encontrado una respuesta mejor o te hayas informado de tal manera que creas que ya no es conveniente pensar así.
Y no olvidemos lo importante que es verse bien, quizás cambiar cosas de tu cuerpo o de tu mente que no te gusten, nunca está demás, pero aceptar todo lo que puedas de lo que eres; sin hacerte de menos o pensar que no podrás lograr algo.
Recuerda tus heridas, quiere tus cicatrices y no olvides que después de todo el dolor, sigues en pie para luchar por lo que quieres. Quizás no sea la verdad absoluta, lo correcto o tus ambiciones cambien, pero es importante no dejarse perder a uno mismo y aportar todo el bien que puedas a las personas que quieres, hasta que decidan que es hora de marcharse y debas dejarlas ir, sin que esto te haga mucho daño.
Es importante, también,  desnudarse ante las personas y quitarse la coraza, de vez en cuando, con las personas correctas. Si te quieren, sabrán acariciar tus cicatrices, hasta que dejen de importarte lo suficiente, como para saber que has superado esa herida pasada.