Se fue rompiendo pieza a pieza

Se fue rompiendo, pieza a pieza, hasta que no se supo que forma tenía, cuánto de bonito fue en su día y como todo ese camino podría a ver sido diferente.

A veces no eliges tu destino y de repente te encuentras en medio de la nada, gritando sordamente a tus fantasmas, vestido de toda la soledad posible y con todas las fisuras de tu cara desfiguradas. Te encuentras despiéndote de su sonrisa, de sus besos, de todo lo que un día fue y ahora guardas como odio.

Nunca he creído que el amor fuese el problema, más bien creo que es la falta de amor lo que crea los problemas y que cuando uno deja de sentir lo que debería, tendría que cortar antes de que su amor se disipe y se convierta en un vaho de odio. Y así empieza la triste historia de estos personajes, que hicieron de su amor un campo de batalla y que acabó con todo lo que les rodeaba.

Ella tenía una bonita sonrisa, él tenía una triste mirada y juntos parecían hacer una vida más feliz. Los viajes, los amigos, las nuevas experiencias, todo hizo de esto una bonita relación. Al principio todo fueron sonrisas, cervezas que sabían a gloria a cada sorbo y buenas conversaciones que le daban sentido a todo.

Sin embargo, poco a poco se fue quemando, la sonrisa y la mirada cada vez estaban más contaminadas, los viajes, los amigos y las nuevas experiencias se fueron alejando de su ajetreada vida y todo hizo de esto una peor relación. Gritos, malas conversaciones, noches llorando en camas separadas y la función de plantearse una y otra vez si realmente su situación estaba bien. 

Todo terminó con el último sorbo de cerveza, ella la miró y comprendió que por mucho que lo intentase, nunca más volvería a beber de la misma cerveza, probaría diferentes cervezas que se pareciesen a esa, pero nunca sería lo mismo, al igual que su relación.
Cogió la puerta y se marchó.

Fue la ultima vez que se vieron, pero algo estaba claro, su historia se había consumido y lejos el uno del otro estaban mejor.

Si te empeñas en querer a lo que tus sentimientos eliminaron o cambiaron de emociones, estarás condenado a odiarlo de por vida.

V.K.