Las fibras de mi cuerpo

Quiero odiarte, pero la fibras de mi cuerpo no me dejan.
Elijo las fibras que más nostalgia me crean, intentando respetar cada decisión tomada y transformo el dolor en motivaciones de cada día.
Mis fibras vibran como las cuerdas de una guitarra y mi voz suena como un violín desafinado, pero hoy componen una melodía más sonora.
Miro mis fotos y solo veo personas que me hacen más grande y que me liberan del miedo y de los problemas del mundo para demostrar que el ser humano puede ser bonito, si su naturaleza es sincera.
Y no sé lo que es el amor, pero sí sé que es querer a los seres cercanos, aunque no sea una película romántica en la que chico quiere a chica. Esa teoría de la películas de Disney Channel las abandoné hace años.
Hoy sólo quiero sentirme cómoda, natural y querida.
Hoy quiero crecer con la tranquilidad y el terremoto del resto.
Quiero formar un huracán, para construir aquello que otros tiraron.
Me dijo una persona valiosa que la comunicación es la mejor herramienta, pero he descubierto que si amor y respeto van de la mano, aún serán más fuertes.