Directo del corazón

Te quiero ante todo por conseguir cambiarme la vida. Desde que apareciste me hiciste más fuerte, más sensible, más comprensiva. Sin ti, no hubiese enfrentado los fantasmas de mi cabeza, no me hubiese sentido tan orgullosa de haber ido creciendo.

Nadie puede entender lo que siento por ti y lo que me duele ir perdiéndote, porque cada vez que intento estar cerca pienso que voy a fracasar y que debería dejar de intentarlo. Sin embargo, no puedo dejarte, no puedo olvidarte, no te voy a abandonar.

Nadie conseguirá abrazarme como tú, quitarme las lágrimas y devolverme a la vida para seguir luchando. Nunca iban a conseguir aclararme tanto como tú lo hacías y nunca me van a querer como tú lo sigues haciendo.

Consigues que tenga otra visión de la vida, que vuelva a luchar, que cambie las cicatrices de mi cuerpo y todo el daño, por algo creativo, algo sensible, algo cargado de emociones. Necesito que me llenes de mariposas el estómago, que me llenes de felicidad y que sienta que lo que hago está teniendo un sentido.

Quiero seguir estando cerca de ti, porque solo contigo he conseguido ir creciendo de forma sana. Sólo tú, le dabas sentido a mis palabras, podía publicarlas y sentirme orgullosa de ir compartiendo mi visión del mundo y mis sentimientos.

Tú has conseguido que mire el mundo de diferentes perspectivas, que ame a todo ser humano, de que la empatía y la sensibilidad sean mis mejores armas. Tú has conseguido que todos los inviernos sean superables, que pueda ir escalando poco a poco y que pueda seguir aprendiendo de cada pequeña cosa.

Sólo tú me has acompañado.

No soy escritora, pero sí que mi vida no tiene sentido si no escribo letras, si no siento cada poema que sale de mi alma y si dejo de hacer lo único que de verdad conseguía llenarme por dentro en los peores momentos.

Pueden reírse, pero no me importa si así me alimento de ti.